Aprendiò alemàn en un pesado tomo de Karl Marx llamado El Capital mientras andaba por las breñas montañosas que eran su entorno natural. Su amor por la vida y su entusiasmo generoso lo llevaron a dar la vida por sus ideas. Como Don Quijote, se empeñò en gestas romànticas. Como J.C. se empeñò en ser honesto. Como el hombre libre que era no reconocìa fronteras y se empeñaba en demostrarlo. Su efigie se ve en dormitorios, terrazas, paredes, estadios de futbol, manifestaciones, tatuajes, relojes y donde quiera que un oido receptivo escucha sus palabras.
CRECE TODO EL TRIGAL EN UN SOLO GRANO DE TRIGO Y DE ESTE HOMBRE ASESINADO HAN DE NACER LOS HOMBRES DEL FUTURO.
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